Hace casi dos semanas entró en funcionamiento el establecimiento de salud de Castilla, ubicado en el AH Cossio del Pomar, a pesar de no contar con el personal asistencial suficiente para atender la demanda del servicio que se creará en esta zona del distrito. Cabe mencionar que a los días que se apertura el local, familiares de un paciente denunciaron que hubo demoras y deficiencias para poder atenderlo, como si hubiera ocurrido en Cesamica.
Son los propios médicos del establecimiento, quienes refieren que solo hay 16 especialistas para atender la demanda de al menos 160 mil personas que viven en Castilla, sobre todo en Tacalá, Los Almedros, La Primavera, y sectores aledaños. “Con el pasar de los meses, los pacientes, la demanda de atención va a incrementar. Pedimos a la Dirección regional de Salud, nos explique nuestra situación a futuro”, indicó el galeno Alfredo Clemente.
Leer más>>>Piura: Cesamica en su etapa final al traspasarse servicio a moderno ES I-4 Castilla
Por su parte, Arnaldo Vite, exasesor del Ministerio de Salud, indicó que, de no asignarse el presupuesto correspondiente, el establecimiento podría caer en un “elefante blanco”. “Podría pasar como con el hospital de Chulucanas, que lo inauguraron y no había presupuesto para los servicios o para contratar personal, a pesar del compromiso de la presidenta Boluarte. Ahora, no se sabe si hay presupuesto para seguir con su funcionamiento. De nada sirve tener buena infraestructura y equipos, sino hay personal capacitado para que le de vida”, indicó.
A su vez, vecinos de diferentes sectores de Castilla, sobre todo de Chiclayito, Las Monteros, El Indio, Calixto Balarezo, Campo Polo, Talarita, cercado de Castilla, señalan que el cambio del local del Cesamica, afectará su bolsillo y es que, para llegar hasta el local, se deben movilizar en un mototaxi, gastando entre 8 y 10 soles.
“Ahora estamos en un lugar no estratégico, lo que afecta a la economía de los pacientes y del personal médico que labora aquí. Estamos en una zona donde es difícil llegar”, mencionó Clemente.