El Juzgado de Investigación Preparatoria de Sullana, especializado en delitos de corrupción de funcionarios, ha dictado nueve meses de prisión preventiva para los efectivos policiales Pablo Aldair Gonzales Serna y Marlo José Ortega Adrianzén. La medida fue ordenada por el juez Jorge Andrés Nole Sócola, debido a la presunta implicación de ambos en el delito de cohecho pasivo propio en el ejercicio de la función policial.
Según la Fiscalía Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios, los hechos se remontan a la medianoche del pasado 9 de noviembre, cuando los agentes habrían solicitado al ciudadano Oliver Alonso Salgado Aranda la suma de 200 soles a cambio de no derivarlo a la comisaría de Los Órganos, Talara. Salgado Aranda no contaba con SOAT actualizado, licencia de conducir ni revisión técnica en el vehículo que conducía.
El magistrado señaló que existen elementos de convicción que vinculan a los policías con el delito imputado. Estos elementos incluyen la “reproducción, visualización, escucha y transcripción de archivos de audio y videos”, además de las actas de intervención y las declaraciones tanto de los imputados como de los agentes que participaron en la detención. “Estas pruebas configuran un escenario sólido que permite concluir que existe vinculación directa entre los acusados y el presunto delito de corrupción”, añadió el juez.
Respecto a la prognosis de la pena, el delito de cohecho pasivo en el ámbito policial, previsto en el artículo 395-A del Código Penal, establece una condena de entre seis y diez años de prisión e inhabilitación para aquellos que soliciten donativos o beneficios en violación de sus funciones.
En cuanto a Oliver Salgado Aranda, la Fiscalía también lo investigó por cohecho activo en el contexto de la función policial. Sin embargo, accedió al beneficio de la terminación anticipada, un mecanismo que permite reducir la pena a cambio de colaboración en el proceso judicial.