Tras ser suspendido por 30 días por presuntos actos de corrupción, el alcalde del distrito de Castilla, Luis Ramírez Ramírez, fue impedido de ingresar a la oficina de alcaldía y retomar su cargo como autoridad edil.
Redacción
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Desde tempranas horas de la mañana, un grupo de efectivos policiales se ubicaron en el exterior de la municipalidad y otro en la alcaldía, por lo que Ramírez espero para poder ingresar. Sin embargo, no pudo.
El burgomaestre aseguró que, esto se ha desatado por situaciones políticas que está afectando la gestión en el municipio castellano. Dijo que hasta la fecha no ha sido notificado sobre la suspensión que solicitaron algunos regidores y la alcaldesa Marcela Fernández el último sábado en una sesión extraordinaria.
«Así como se emite una resolución por parte del Jurado Nacional de Elecciones (JNE), reconociendo a alguien que ha sido electo por la población, también el que quiere ser alcalde tiene que primero enviar el aviso previo a la persona que ha sido suspendido, luego yo tengo la posibilidad de poder impugnar, pero eso no ha sucedido, hasta ahora no me han notificado, sin embargo, encuentro a otra personas acá», precisó el burgomaestre.
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Consideró que, esta suspensión no se ajusta al reglamento interno del concejo, «dice claramente que las causales de suspensión o de vacancia y ninguno de los causales han sido cumplidos en esa sesión.
Ramírez desmintió indicios de corrupción durante su gestión y negó que no se haya pagado a sus trabajadores y a los proveedores, ya que por esta situación él fue suspendido.
«La firma ha sido fraguada, estuvo mal del brazo y no pudo firmar, hay un elemento que no se ha ajusta a la verdad con documentos falsos. También se ha adjuntado dos documentos supuestos proveedores no se les ha pagado, el alcalde no tiene nada que ver, yo no puedo estar diciendo páguenle, incurriría en un agravio, eso lo hace el administrador, el gerente municipal pero el alcalde no», advirtió.
La autoridad edil anunció que tomará medidas legales y dijo que esto es un abuso de autoridad tras no poder ingresar a su oficina.
Mientras tanto, la población en el exterior del local protestaba para exigir su salida, según señala no ha hecho nada por Castilla.