La segunda más alta de la tierra después del Everest, bautizada como “la montaña salvaje” de los Himalayas, debido a sus desafiantes características fue coronada por la peruana, Flor Cuenca.
Un orgullo para el país representa el nuevo hito de la escaladora peruana con gran sacrificio y determinación, la cumbre de la montaña K2, catalogada como extrema por su grado de dificultad. Flor Cuenca, ancashina de nacimiento, se convierte en la primera peruana en llegar a la montaña más difícil de los ocho mil m.s.n.m sin ayuda de oxígeno artificial.
Conocida por sus amistades como Hirkawarmi (mujer de montaña en quechua) alcanzó este importante logro el 28 de julio a las 11:45 a.m. hora de Pakistán y 1:45 a. m. hora de Perú, como regalo de Fiestas Patrias.
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Como se recuerda Flor Cuenca, hizo noticia en el 2016 al convertirse en una de las primeras peruanas en escalar el Cho Oyu 8.201 m s. n. m, la sexta cumbre más alta del mundo en el Himalaya.
S través de sus redes sociales dio a conocer lo emocionada que se encuentra por este nuevo récord y a la vez lamentó los accidentes que han sufrido algunos de sus compañeros de montaña durante estas travesías.
Esta nueva conquista deportiva acrecienta su fama y reconocimiento a nivel nacional e internacional, sobre todo porque lo hizo sin apoyo de oxígeno artificial, lo cual significó un enorme esfuerzo físico y mental.