Indignante. Una niña de dos años fue asesinada por su padrastro y su adolescente madre por dejar caer un celular. El condenable hecho ocurrió en la región Cusco. La pareja había denunciado la desaparición de la menor, pero luego confesaron el crimen.
Carlos Orcossupa Rojas (21) lanzó el cuerpo de la menor al río Huatanay, sin embargo, la madre de 17 años acudió al Departamento de Investigación Criminal (Depincri) a poner la denuncia por la pérdida de su hija. Luego de algunas contradicciones, la madre confesó la verdad.
El cuerpo de la niña fue encontrado envuelto en mantas y un costalillo al borde del río, este mostraba signos de laceraciones, golpes y cortes.
Los agentes de investigación rápidamente detuvieron al padrastro, quien estaba en las afueras de la comisaría. Finalmente, la pareja confesó que mató a la niña y revelaron el paradero de su cuerpo.
Investigado por violencia
Por otro lado, el Comandante Luis Cordero, jefe de la DIVINCRI Cusco, reveló que el padrastro contaba con antecedentes de violencia familiar por parte de su anterior pareja.
Según las autoridades, tanto Orcossupa como la madre de la víctima tendrían algún trastorno, ya que no muestran signos de culpabilidad. Además, se presume que la niña venía siendo maltratada desde hace dos meses, presentando múltiples lesiones y señales de abuso.
Las autoridades encontraron los restos de la menor en el río Huatanay, en el distrito de San Jerónimo. Trascendió que la niña de 2 años presentaba signos de tortura y hematomas en casi todo el cuerpo.
Por este caso, el sujeto de 21 años y la madre serán investigados por presunto parricidio.
De acuerdo con el Poder Judicial, la comisión de este delito se castiga con una pena de 15 a 25 años de prisión. Si existe una agravante, la sanción máxima es 35 años de cárcel.