Gustavo Guarnizo
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El director regional de Transportes y Comunicaciones, Jaime Saavedra Diez, sostuvo que la falta de control policial en las carreteras, especialmente en las vías departamentales contribuyen a la alta incidencia de accidentes de tránsito, y por ende a la gran cantidad de fallecidos por esta causa.
«A nosotros nos compete la administración del transporte en las vías departamentales. Hacer cumplir el Reglamento Nacional de Tránsito le corresponde a Policía, y es que la mayoría de accidentes suceden por infringir este reglamente», expresó.
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Las violaciones a este reglamento radican en conducir a excesiva velocidad en las carreteras; segundo, no le hacen caso a la señalización; y tercero conducen ebrios. «Esto ya está regulado en el Reglamento, e incluso la cuarta causa que es imprudencia del peatón», añade.
En los primero nueve días del mes de abril de este año han muerto al menos seis personas en cinco accidentes de tránsito suscitados en diferentes vías de la región y principalmente en la ciudad.
El domingo 01 de abril un padre y su hijo de 2 años murieron al ser arrollados por una camioneta en Cruceta, Tambogrande; el martes un joven murió al despistarse una camioneta en la ciudad de Piura, ese mismo día un niño fue impactado por un camión, y horas más tarde un motociclista perdió la vida al despistarse su vehículo en Buenos Aires, Morropón.
Hoy un policía también perdió la vida al ser arrollada la motocicleta en la que se trasladaba junto a un compañero por la vía Piura – Chulucanas.
«La mayor cantidad de accidentes es en la ciudad, pero donde hay más muertos son en los que ocurren en carreteras que conectan con las demás provincias», explica.
Saavedra sostiene que como medida a corto plazo se debe fortalecer los mecanismos de control para garantizar que los conductores y empresas de transportes cumplan al pie de la letra los requisitos para conducir un vehículo y transportar pasajeros, respectivamente.
Ello radica, por ejemplo, en que haya más control de la policía de carreteras, verificando que no no conduzcan a excesiva velocidad o que el conductor no esté ebrio. Lo mismo ocurre en las ciudades.
«Siempre va a faltar recursos. No es posible tener un policía en cada calle. En la ciudad es competencia de la Policía de Tránsito. En carreteras hay menos policías porque no solo vigilan el transporte si no otras acciones respecto a seguridad ciudadana», indica.
Sin embargo, sostiene que la solución a largo plazo es que cada persona, es decir, el peatón, el conductor, los empresarios, e incluso las autoridades; «cambien de actitud» y sean responsables en el cumplimiento de sus funciones.
«Lo principal es cambiar de actitud frente a las causas de los accidentes de tránsito. Se ha conseguido que haya un módulo de seguridad víal en las escuelas. Asimismo el Ministerio de Transportes publicó el Manual de Seguridad Víal donde se dan las pautas técnicas para la construcción de vías»,expresó.
Esto debería incidir en que los ciudadanos, por ejemplo no se pasen la luz roja, o que se embarquen en paraderos formales.
