El meteorólogo del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi), Nelson Quispe, ha emitido una advertencia sobre la posibilidad de que las lluvias asociadas al fenómeno «El Niño» inicien en enero de 2024, si la tendencia actual de aumento de la temperatura del mar se mantiene hasta alcanzar el umbral crítico de los 26 grados Celsius.
Según Quispe, al alcanzar esta temperatura, la atmósfera se desestabiliza, creando las condiciones propicias para la precipitación. «Viendo la tendencia es muy posible que hacia la primera semana de enero del 2024 lleguemos a ese valor de 26 grados. Eso nos indica que la posibilidad de ocurrencia de lluvias es más alta. Los valores de la temperatura ya van en ese camino», destacó el especialista.
Actualmente, los valores de la temperatura del agua de mar oscilan entre los 22 y 23 grados Celsius. Quispe señaló que la única posibilidad de atenuar este escenario es la presencia del Anticiclón del Pacífico Sur, que limitaría el aumento drástico de las temperaturas.
En cuanto a la intensidad del fenómeno «El Niño», Quispe aclaró que tanto El Niño Costero como El Niño Global están en un nivel de magnitud fuerte. Sin embargo, esta magnitud no tiene una relación directa con la intensidad de las precipitaciones que se registrarán en Piura.
«Hasta el momento no existe un índice que nos diga sobre los efectos, sino solo sobre el calentamiento de la temperatura superficial del mar», añadió el meteorólogo.
El último pronóstico del Senamhi para el verano de 2024 señala que no se descartan lluvias muy fuertes en la región de Piura. En la costa norte, se estima una probabilidad del 46 % de lluvias por encima de lo normal, con un 32 % de probabilidad de lluvias dentro de lo normal. Además, se alerta sobre la posibilidad de eventos de lluvias muy intensas.
Quispe recordó la precipitación más intensa registrada durante el El Niño Costero del 2017, alcanzando los 75 milímetros en una hora, lo que implica la caída de 75 litros de agua por metro cuadrado.
Para la sierra de Piura y Cajamarca, se prevé que las lluvias estén por encima de lo normal con una probabilidad del 42 %, seguido de un escenario de lluvias en niveles normales con una probabilidad del 35 %. Se recomienda a las autoridades evaluar los riesgos y prepararse para posibles eventos climáticos adversos que puedan afectar a la población.
Fuente: El Tiempo