Inspectores de la dirección de Fiscalización y Regulación Sanitaria de la Diresa Piura, durante una intervención inopinada habría encontrado en condiciones antihigiénicas, hacinamiento y tugurización, algunas instalaciones de supermercados en Piura.
Según la nota de prensa enviada por la Diresa Piura, los servicios higiénicos, salas de producción y almacenes de los supermercados Maxi, se encontraron en circunstancias insalubres a cuyos propietarios se les levantó un acta con las respectivas observaciones.
El primer punto de supervisión fue la tienda Maxi, ubicada en la urbanización Miraflores, Castilla. Allí se especifica que los servicios higiénicos se encontraban en deplorable estado, mientras que, en algunos ambientes de supermercado, sobre todo en el área de carnes, las moscas circulaban en el lugar.
LEER MÁS: Diresa espera se prorrogue estado de emergencia sanitaria en Piura
De igual forma, los almacenes de productos comestibles y de limpieza se hallaron mal dispuestos, con las paredes vetustas y descoloridas, y en espacios demasiado reducidos. Las escaleras de acceso al segundo nivel lucían viejas y sin ningún tipo de mantenimiento.
Mientras tanto en el supermercado Maxi, ubicado en la avenida Sánchez Cerro, los inspectores detallan que en el ambiente de la panadería encontraron moldes para la elaboración de las tortas y queques, demasiado viejos y oxidados.
Igual las canaletas de alcantarilla, los utensilios, el lavatorio y los pisos se mostraban demasiado usados y necesitan urgente reposición. Los coches de madera lucían llenos de grasa, así como los anaqueles para el transporte del pan.
LEER MÁS: Trabajadores de salud realizan protesta en Diresa
Similares hallazgos se registraron en el supermercado Maxi de la urbanización Santa Isabel, donde los almacenes estaban atiborrados de cajas sin ningún tipo de selección y espacio para el tránsito de las personas.
Miguel Ruiz, director de Fiscalización y Regulación Sanitaria, señaló que las inspecciones continuarán en otros supermercados, así como en los patios de comida de los principales malls de la ciudad.
“Nuestro objetivo es asegurar la correcta manipulación de alimentos, así como en la inocuidad, preservación y almacenamiento de los productos procesados en salvaguarda de la salud de los usuarios”, indicó.
A los administradores se les extendió un acta con las observaciones, otorgándoles un plazo de quince días para levantarlas, de lo contrario en coordinación con la fiscalía y la municipalidad se procederá al cierre del establecimiento.