Los familiares de la enfermera de 32 años que falleció tras la horrenda violación y agresión sexual, están velando las ropas y fotografía de la víctima en un domicilio de la avenida Hipólito Unanue de Juliaca. El cuerpo inerte recién será trasladado este viernes en un vuelo humanitario.
“Pedimos justicia, no es posible que hayan llegado hasta este extremo, tengo tres sobrinos que quedan huérfanos, esperamos que el Ministerio de la Mujer nos apoye. ¿Por qué le hicieron esto a mi sobrina?”, preguntó entre lágrimas uno de sus tíos.
«Mi sobrina era como mi hija, era una chica tranquila y responsable, era responsable con sus hijos y su trabajo, ahora ¿Qué va ser de ellos? por culpa de esos malditos. Que se haga justicia”, agregó su tía.
Los parientes piden garantías, ya que denunciaron estar recibiendo amenazas de muerte presuntamente por parte de sujetos allegados a los sospechosos de violadores, quienes ya se encuentran en el penal de Juliaca.
«También pedimos garantías para toda la familia, estamos recibiendo amenazas”, añadió el familiar.
Señalaron que, hoy será traído el cuerpo, el día sábado le darán cristiana sepultura en el cementerio de la urbanización La Capilla.
Diversas organizaciones sociales y colectivos realizaron marchas y anuncian que seguirán con similares movilizaciones, exigiendo a las autoridades que sancionen de forma drástica a los autores de este terrible hecho.
La noche del miércoles, sus colegas realizaron un plantón frente a la sede de la Corte Superior de Justicia de Puno, exigiendo la máxima de las condenas para los dos involucrados en el caso.