El mundial de Rusia está dejándonos una serie de lecciones, entre ellas que el trabajo serio y la disciplina siempre rinden frutos, que es posible soñar y cumplir las metas y lo esencial que resulta trabajar el campo emocional para estar más cerca del éxito que del fracaso.
Redacción
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Para el psicólogo clínico Aldo Pissani, nadie ha permanecido inmune a la locura de la copa de fútbol, en especial tras la participación de la selección peruana en una competición de este tipo después de 36 años.
“Hay muchas lecciones que sacar del futbol para nuestra vida cotidiana. Clasificamos para el mundial y logramos hermanarnos. Hubo una apropiación de la camiseta. Se le colocó en un lugar expectante. Todo el mundo estaba identificado con ella. Fue un símbolo de unificación tremenda sin distingo social y económico”, anotó.
Dijo que si bien la selección tuvo una excelente participación, la hinchada fue la sorpresa del mundial.
“Los hinchas demostraron que quienes tenemos una visión, un sueño, lo podemos realizar. Mostraron el valor de la persistencia, la constancia y la vocación. Esto puede servir para que otros digan yo quiero, me voy a preparar, documentar y haré más explícita mi participación. Lo lograré”, manifestó.
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Pissani, quien es secretario de la Comisión de Medicina y Unidad Antidopaje de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), mencionó que la selección logró marcar una diferencia gracias al gran trabajo del cuerpo técnico, que no dejó nada al azar, además de darle un peso importante al campo emocional y psicológico de los jugadores.
“Hubo interconectividad de las especialidades profesionales: director técnico, médico, nutricionista, preparador físico, fisiólogo. Todos estaban conectados. La gran sorpresa fue el psicólogo de la selección, que viajaba siempre con el equipo, que se le veía en cancha. Eso no ha ocurrido nunca”.
Rompiendo mitos
Indicó que los peruanos no están habituados a desarrollar la parte psicológica y mental, porque siempre asocian psicología con trastorno, pero felizmente esa percepción está cambiando.
“Ahora la salud mental ha empezado a verse como sinónimo de prevención y la asesoría como apoyo para la resolución de conflictos”, comentó.
Fuente: Andina
