En todo el mundo son 19 los países que castigan con pena de muerte a los sentenciados por violación sexual. La mayoría de ellos son naciones pertenecientes a África y Asia.
En el Perú, las altas cifras de violaciones sexuales mantienen el debate abierto sobre si este castigo es el más justo para los condenados por este delito. El caso de la censadora violada en Villa El Salvador no ha sido la excepción.
Y es que en nuestro país no existe la pena de muerte para tal delito. El máximo castigo que se emplea es para violadores sexuales de menores, los cuales reciben cadena perpetua.
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El panorama en 19 países del mundo es distinto. De acuerdo al caso, los sentenciados por violación sexual son condenados a perder la vida en Bangladesh, China, Corea del Norte, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Guyana, Kuwuait, Iraq, Irán, India, Indonesia Pakistán, Palestina, Siria, Sri Lanka, Tailandia, Tayikistán, Uganda y Vietnam, según apunta un informe del diario El Colombiano.
Para que en el Perú se instaure la pena de muerte, el país tendría que renunciar al Pacto de San José de Costa Rica, el cual impide a los países extender este castigo a delitos que no estuvieran ya contemplados con anterioridad en sus territorios.
Únicamente en el Perú solo está contemplada la pena de muerte por traición a la patria.
Fuente: Perú.21
