Las aspiraciones del Perú de ser un país de ingresos altos todavía están lejos de materializarse y recién llegaría a esa etapa en el 2029, estimó la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Con ello, el país sumaría 80 años en la categoría de ingresos medios.
Pasar ocho décadas en ese estatus es un período relativamente largo. Corea del Sur, por ejemplo, demoró 27 años en dar el salto. Portugal se tardó 46 años y Chile lo logró en 55 años.
Sin embargo, llegar al club de ingresos altos requiere una condición clave, que es mantener los buenos resultados macroeconómicos. En particular, la OCDE proyectó que es necesario que el PBI por habitante crezca al menos 4,6% por año para llegar en el 2029 al estatus de ingresos elevados; dato similar al observado en los últimos 10 años.
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Acelerar el crecimiento de la actividad económica es solo uno de los múltiples retos de mediano y largo plazo del país, según la OCDE. Así, considera que generar un desarrollo más inclusivo es fundamental, pues, por ahora, el 40% de la población peruana es de clase media vulnerable.
En la definición del Banco Mundial, la clase media vulnerable es aquella que vive con un ingreso diario entre 4 y 10 dólares. Esto –resalta la OCDE– es algo preocupante, pues cualquier evento puede devolver a este sector a una situación de pobreza.
Para reducir este riesgo, es clave avanzar en formalización, pues el 80% de la clase media vulnerable trabaja en la informalidad, estimó la entidad. La agenda propuesta en ese sentido es bastante amplia, pero resaltan propuestas ya presentadas por la Comisión de Protección Social: avanzar en cobertura universal en salud y también en pensiones.
La OCDE precisa que, entre los trabajadores informales, un 52% gana menos que el salario mínimo (S/850 al mes) debido a su baja productividad. Por ello recomienda migrar hacia un esquema de sueldo mínimo que dependa de la productividad, además de permitirle evolucionar de manera diferenciada por regiones.
Fuente: El Comercio