Ayer se realizó la audiencia de juicio oral contra el suboficial de tercera, Marcelino Israel Yarlequé Saldaña, acusado de homicidio simple y de abuso de autoridad, en agravio de César Eduardo Hurtado Chorres, quien resultó muerto durante una intervención el 15 de noviembre del año pasado, en Piura.
Redacción
prensa@noticiaspiura30.com
La fiscalía representada en este caso por el fiscal Manuel Trinidad Poquioma Gómez ha solicitado diez años de pena privativa de la libertad contra el policía, por ser el presunto autor de la muerte de Hurtado Chorres, quien falleció de un disparo en el tórax, supuestamente efectuado por el procesado.
El abogado del policía, Salvatore Hurtado Magliulo, sostiene que no fue Yarlequé quien dio muerte a Hurtado Chorres. Él asegura que si bien el policía usó su arma de fuego, lo hizo disparando al aire, para disuadir a un grupo de personas que agredían a su compañero John Roger Salinas Garcés, y que otras personas habrían hecho otros dos disparos.
Ayer, durante la audiencia presidida por la jueza Nancy Carmen Choquehuanca, titular del Tercer Juzgado Unipersonal de Piura, se presentaron tres testigos, un amigo que acompañaba al occiso, su viuda y su hija.
Durante su declaración, la defensa observó contradicciones de los tres testigos, con relación a lo que anteriormente habían declarado.
El testigo José Lanazca Gagliufi, durante su declaración dijo ayer que no tenía apodo ni sobrenombre, mientras que un familiar de su amigo señala que era conocido como “Diablito”. También que no había tenido procesos policiales, fiscales o penales, lo que fue refutado por el abogado Hurtado Magliulo, quien dijo que sí había sido procesado por peligro común ante la Fiscalía de Castilla.
Lanazca también indicó que en el momento de los hechos, el policía Yarlequé se encontraba a unos dos metros de distancia de ellos.
| LEER MÁS >>> Piura: presentarán hábeas corpus a favor del suboficial Yarlequé acusado de matar a un mototaxista
La hija del occiso, Katherine Hurtado, manifestó que cuando indagaba por lo sucedido a su padre, en la comisaría de Castilla le indicaron que los agentes no habían dado cuenta del suceso. También dijo que desconocía que su padre consumía drogas, cuando en su declaración anterior señalaba que sí sabía que era consumidor.
Finalmente se presentó Aracely del Pilar Guerrero Gonzáles, esposa del occiso, quien manifestó que desconocía que era consumidor, cuando en una anterior declaración manifestó que sí sufría de adicción, aunque no frecuentemente, según le hizo ver el abogado de la defensa.
También negó que su extinto esposo haya tenido algún proceso fiscal, policial o penal, lo que fue observado también por la defensa al recordar que lo había denunciado en una oportunidad por violencia psicológica.
Un cuarto testigo de la Fiscalía no se presentó al juicio, por lo que la magistrada decidió dar por terminada la audiencia de juicio oral, fijando para la próxima semana la continuación del proceso.
El abogado Salvatore Hurtado cuestionó las declaraciones de los testigos, ya que, según él, habrían incurrido en falsa declaración al contradecir su declaración anterior en algunos puntos.
“Hay muchas contradicciones de los testigos que desbaratarían la tesis fiscal, y esperamos lograr la absolución de Yarlequé”, dijo el letrado.