Una mujer fue interceptada por el personal de seguridad del penal de Piura cuando intentaba ingresar sustancias prohibidas en su estómago al centro penitenciario. Este incidente pone de relieve los esfuerzos continuos para evitar la introducción de drogas en las cárceles, así como las consecuencias legales para quienes intentan hacerlo.
Kassandra Manrique Soto, de 22 años, fue intervenida el sábado a las 9:55 a.m. durante una revisión de rutina en el penal de Piura. El personal de seguridad notó su nerviosismo durante la revisión corporal, lo que los llevó a sospechar que podría estar llevando consigo sustancias ilícitas. A pesar de negarlo inicialmente, la experiencia del personal sugirió lo contrario, lo que llevó a una inspección más detallada.
Inmediatamente, se alertó a las autoridades del penal, quienes solicitaron la presencia del Ministerio Público y la Policía Nacional, específicamente la Unidad Antidrogas y Crimen Organizado, para llevar a cabo las diligencias correspondientes. Con la asistencia de personal de la fiscalía y el médico legista, se confirmó que Manrique Soto llevaba objetos extraños en su cuerpo.
La mujer fue trasladada al hospital para una evaluación médica, donde se descubrieron 10 cápsulas conteniendo presuntas sustancias prohibidas. Se reveló que Manrique Soto estaba visitando a su hermano, Henry Manrique Soto, de 26 años, quien cumple una condena por Tráfico Ilícito de Drogas y está ubicado en el pabellón 4 del penal.