Los vecinos del asentamiento Micaela Bastidas, en el distrito Veintiséis de Octubre, enfrentan una alarmante crisis debido a la paralización de obras esenciales de agua potable y alcantarillado, iniciadas en julio, pero abandonadas hasta el día de hoy. Esta situación compromete gravemente la calidad de vida y la salud de la comunidad.
La falta de agua potable obliga a las familias a recurrir a opciones costosas e inseguras, mientras que la ausencia de un sistema adecuado de alcantarillado ha resultado en aguas residuales expuestas, incrementando los riesgos de enfermedades gastrointestinales y otros problemas de salud pública.
Los vecinos denuncian públicamente el abandono del proyecto, exigiendo que las autoridades, sobre todo al alcalde del distrito Víctor Hugo Febre, atiendan de inmediato esta problemática.
Los moradores solicitan la reactivación inmediata de las obras y una mayor inversión en infraestructura básica para garantizar servicios de agua y saneamiento de calidad. Además, plantean la necesidad de implementar planes de mantenimiento para evitar futuros colapsos.
La comunidad insta a las autoridades locales y regionales a tomar medidas inmediatas para resolver la crisis. Asimismo, buscan generar conciencia sobre la importancia de estas obras para asegurar la salud y el bienestar de los habitantes de Micaela Bastidas.
