La urbanización El Pinar, en el distrito limeño de Comas, se ve envuelta en angustia y temor tras el secuestro de Valeria, una adolescente de 12 años, el pasado lunes 11 de diciembre. La familia vive una pesadilla, con los secuestradores exigiendo ahora tres millones de soles para liberar a la menor.
Valeria, estudiante del colegio particular John Nash High School, fue abordada por cuatro hombres en una minivan plateada mientras regresaba a casa junto a su hermano menor. Los delincuentes interceptaron la movilidad escolar en la puerta de su domicilio, raptando a la adolescente. Su hermano logró descender antes del incidente y entrar a salvo a la casa.
El padre de Valeria, dedicado a la contabilidad, relató con desesperación: «Salió del colegio con la movilidad. En la puerta de mi casa se producen los hechos y es secuestrada mi menor hija». Cámaras de seguridad captaron el vehículo plateado siguiendo la movilidad escolar, y testigos afirman que los delincuentes amenazaron al chofer y al ayudante antes de llevarse a la menor.
Padres de familia, consternados por el hecho, realizaron un plantón frente al colegio de Valeria el martes 12 de diciembre, exigiendo la liberación de la adolescente y solicitando la intervención de las autoridades.
La Sexta Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Lima Norte inició una investigación preliminar el mismo martes, y el Ministerio Público anunció la recopilación de registros de video y declaraciones de testigos. Hasta el momento, la policía está trabajando arduamente en el caso, según afirmó el comandante general de la PNP, general Jorge Angulo.
En un comunicado difundido en redes sociales, el padre de Valeria informó que la familia se mantiene en contacto con los secuestradores y que la adolescente se encuentra bien. La presidenta de la República, Dina Boluarte, expresó su solidaridad y aseguró que la PNP está detrás de los responsables.
El jueves 14, los exteriores de la vivienda de Valeria fueron escenario de movimiento de familiares, aunque aún no hay noticias sobre su paradero. La comunidad de Comas permanece en vilo, esperando el desenlace de este trágico episodio.
Esta mañana se dio a conocer que los padres de Valeria han decidido que la Policía Nacional no participe en el proceso de liberación de la menor. Así lo anunció esta mañana el jefe de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (Dirnic) de la PNP, Óscar Arriola.
El mando policial detalló que, aparentemente, los familiares de la pequeña Valeria fueron atemorizados por los secuestradores.
“La familia se ha reservado el derecho de hacer participar a la Policía, y las razones son obvias, porque pueden haber sido atemorizados por los delincuentes. Nosotros comprendemos eso y no hemos tomado contacto con la familia desde el primer día”, declaró.