Un trabajador que presenta obesidad o sobrepeso, con los consiguientes problemas de salud, tiene dos veces más probabilidad de ausentismo laboral y de desarrollar una serie de enfermedades que afectarán su productividad, sostuvo un especialista en nutrición.
Mewsette Pozo García, de Nutricionistas en Acción, dijo, asimismo, que la mala alimentación durante la jornada laboral puede generar fatiga mental o física, causando que se quede dormido en pleno horario de oficina.
Explicó que las dolencias relacionadas con el sobrepeso son la hipertensión arterial, diabetes, enfermedades cardiovasculares, hígado graso, colesterol elevado, entre otros.
“Las condiciones de trabajo y el tipo de alimentación que proporcionan las empresas, entre otros factores, son determinantes para la salud y la calidad de vida de los trabajadores”, comentó.
La importancia de brindar una alimentación saludable en el trabajo se debe a que hoy en día un gran número de trabajadores consume casi el 75% (desayuno, media mañana, almuerzo y media tarde) de su requerimiento calórico en la empresa.
Por el contrario, cuando los trabajadores están relajados y se alimentan saludablemente son más productivos y reducen el riesgo de enfermedades, beneficiando a las empresas, a ellos mismos y a sus familias.
Un estudio publicado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) afirma que la mala alimentación en el trabajo puede causar pérdidas de hasta el 20% en la productividad.
Por ello, Pozo García recomendó a las empresas crear estrategias que involucren al trabajador, promoviendo hábitos saludables con campañas nutricionales, despistaje nutricional y consultorías, contribuyendo así a mejorar su calidad de vida.
Fuente: Andina