El Poder Judicial ha dejado en libertad a Fray Vásquez Castillo, sobrino del expresidente Pedro Castillo, quien se encontraba en prisión desde enero de este año por su presunta participación en el caso ‘Puente Tarata’. La noticia fue confirmada por su abogado, Hamilton Aliaga.
Vásquez Castillo, quien estuvo prófugo durante varios meses antes de entregarse a las autoridades en Desaguadero, Puno, enfrentará ahora las investigaciones en su contra fuera de prisión. Sin embargo, lo hará bajo comparecencia con restricciones, que incluyen la prohibición de salir del país sin autorización, la obligación de residir en Lima y la prohibición de cualquier encuentro con otros implicados en el caso, como su tío, Pedro Castillo.
«Por ahora, mi patrocinado tiene impedimento de salida del país, debe firmar el registro de control biométrico y no podrá reunirse con otros investigados como Pedro Castillo. Además, no se le ha impuesto ninguna caución», explicó Hamilton Aliaga en una entrevista con RPP.
El abogado también mencionó que, aunque Fray Vásquez está involucrado en otras tres carpetas fiscales como investigado preliminar, su liberación está relacionada exclusivamente con el caso ‘Puente Tarata’. Asimismo, reiteró que su cliente permanecerá en Lima y no se trasladará a otra región.
La Fiscal Marita Barreto, coordinadora del Equipo Especial de Fiscales contra la Corrupción del Poder (Eficcop), ha señalado que Vásquez Castillo podría tener información crucial para las investigaciones en curso, y su entrega a las autoridades en enero fue vista como un indicativo de su disposición a colaborar.
Según la hipótesis fiscal, Fray Vásquez habría actuado como nexo entre su tío y empresarios interesados en obtener la adjudicación para la construcción del Puente Tarata III en la región San Martín. En un reportaje emitido por el dominical ‘Cuarto Poder’ en febrero, se afirmó que Vásquez Castillo se encontraba en Venezuela y que desde allí buscó contactar con su abogado, a través de Jorge Hernández, alias ‘El Español’, quien supuestamente habría establecido una red de contrainteligencia para obtener información de los opositores al gobierno de Pedro Castillo.