La Municipalidad de Tambogrande incautó 130 kilos de carne entre cerdo, cabrito, res, pollo y pescado que se comercializaban en la calle ex paradita nueve de Noviembre de Tambogrande. Se constató que estos alimentos no eran aptos para el consumo humano.
Personal de fiscalización y salud se dirigieron al lugar desde tempranas horas de la mañana. Allí encontraron que algunos vendedores ofrecían productos en mal estado de conservación.
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El médico veterinario de la comuna tambograndina, Julio Castro Mendoza, comprobó que dicha carne no cumplía con las garantías de seguridad. La carne incautada no tenía el sello municipal del camal, haciendo saber que era de dudosa procedencia y al examinarla notaba su estado de descomposición.
Después del decomiso, se procedió a la incineración de la carne para evitar que el consumo de esta perjudique a la población.