Una vez más el caos y el desorden impera en las principales calles y avenidas del Mercado Central de Piura. Los comerciantes informales, utilizando carpas, las veredas e incluso los pases peatonales, se han apoderado de los accesos de entrada y salida de diferentes anexos, perjudicando el libre tránsito de las amas de casa que llegan al principal centro de abastos de la ciudad para realizar sus compras de productos básicos.
Noticias Piura 3.0 hizo un recorrido por el Mercado Modelo y corroboró que su fachada está cubierta por toldos, colgadores de ropa y mesas, que dificultan el libre acceso peatonal. “Uno ya no puede caminar por la vereda con tranquilidad, hay que ir viendo para no tropezar con la mercadería que hay expuesta en el piso o colgada. Súmale eso al riesgo que hay para pasar de un lado a otro, es casi imposible fijarse si viene un auto o una moto. La Municipalidad de Piura, debería tener presencia todos los días y no solo de lunes a viernes”, señaló Yolanda Coveñas, ama de casa que llega dos veces por semana al centro de abastos.
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Consultado con el gerente de Desarrollo y Servicios Comerciales de la Municipalidad de Piura, Luis Encalada Chicchon sobre la presencia de ambulantes en la avenida Gonzalo Farfán y frontis del Mercado Modelo, indicó que con las dos asociaciones de informales se sostienen reuniones para poder ser reubicados y crear un mercado zonal. Indica que luego del primer trimestre de este año, se despejarán dichas vías, se recuperarán las zonas de parqueo y se impondrá el principio de autoridad. “Pero también se tiene que involucrar los mercados privados, para poder asegurar la liberación de las zonas y recuperar los accesos de entrada y salida de estos mercados”, indicó.
BLAS DE ATIENZA
Por otro lado, señaló que existen 28 fiscalizadores que trabajan por mantener el orden en el mercado, aunque reconoce que son rebasados por los ambulantes y la infraestructura, que impide pasar de una acera a otra. Recordó que desde el año pasado se recuperaron las veredas y carriles de la Blas de Atienza y se espera que a más tardar en abril se dé lo mismo en el jirón Gonzalo Farfán, San Lorenzo y la zona del Boulevard. “Estamos trabajando no para desalojar, sino para reubicar. Esperamos que el diálogo de resultados y poder retornar al orden en el principal centro de abastos de Piura”, señaló.
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El año pasado, más de 400 ambulantes fueron desalojados de la avenida Blas de Atienza, desde la avenida Sánchez Cerro hasta el mercado Plaza del Mar. “Pero hoy los ambulantes impiden poder estacionarse, poder caminar sobre la vereda. Imagínese un sismo o un incendio como ya ha ocurrido. La Municipalidad de Piura, si bien tiene la voluntad de poner orden, los ambulantes rebasan a los fiscalizadores”, señaló Marina Sullón, comerciante mayorista. Luis Encalada adelanto que la próxima semana se realizará un operativo de limpieza en estas zonas.