Personal de Fiscalización decomisó 130 kilos de carne de cerdo de dudosa procedencia en mercado Central y Capullanas, ya que los propietarios no contaban con la documentación que acredite el lugar de procedencia de esta carne.
El jefe de la Oficina de Fiscalización y Control Municipal, Jesús Espinoza, sostuvo que todos los locales que venden estos productos vienen siendo intervenidos con la finalidad de evitar daños en la salud de la población al consumir este tipo de carne.
“Estamos identificando los camales clandestinos, y decomisando la carne, así como los locales comerciales que realizan el expendio de este producto. El objetivo es claro, velar por la salubridad de los productos que consume la población, salvaguardando la vida de los piuranos”, indicó.
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Espinoza sostuvo que la intervención se justifica en el Decreto Supremo 015-2012-AG y la Ordenanza Municipal 125-00-CMPP. Por lo que los operativos continuarán en otros mercados de la ciudad, para supervisar el estado de las carnes y si los comerciantes toman todas las medidas de salubridad..