La situación es preocupante para los más de 30 mil habitantes de los asentamientos humanos Luis Alberto Sánchez, Paredes Maceda y San Sebastián, y es que según denuncian, ya llevan 10 días desde que se les cortó por completo el suministro de agua potable.
Los indignados moradores se apostaron en la sede donde funciona el pozo de agua “San Sebastián”, que dota de agua a miles de familia, y exigieron que el gerente interino de la EPS Grau, solucione cuanto antes el problema, abasteciendo de agua, al menos con cisternas.
Gabriel Sernaqué, dirigente del AH San Sebastián, indicó que desde la pandemia el servicio de agua empeoró en la zona, recuerda que desde hace medio año el agua llega a cuenta gotas, “pero desde hace 10 días no tenemos ni una gota de agua en los caños. Nos morimos de sed, no podemos cocinar adecuadamente, los niños sufren. Hay gente que no tiene para comprar los bidones de agua y tienen que mendigar un balde. No es justo señores”, denunció.
Otro vecino, del asentamiento Paredes Maceda, indicó que una solución para que el agua llegue a los que realmente pagan, es que la EPS Grau, junto con la Policía realice los cortes de conexiones clandestinas, que reducen la capacidad de agua y baja la presión. “Si no hacen caso, vamos a protestar todos los días en las oficinas de la EPS Grau”.