Tras recuperar el cuerpo de Fabiana Hernández (18), una de las ocupantes de la avioneta Cessna 172 que cayó en el mar de Huanchaco (Trujillo), ayer la Marina —junto con otras autoridades— retomó la búsqueda de los tres desaparecidos.
El capitán del puerto Salaverry, Richard Fuchs, sostuvo que ya tienen el área de búsqueda más delimitada para encontrar a posibles sobrevivientes; sin embargo, “las posibilidades siguen siendo bajas”.
Fuchs agregó que en un inicio, antes de hallar el único cuerpo, tenían registrados tres desaparecidos, pero la Escuela de Aviación JBC rectificó la información horas después y añadió a Boris Corrales, de 24 años, como el cuarto tripulante que estaba en la avioneta.
Para el padre de Boris, esto se suma a otras irregularidades de la empresa, ya que su hijo le había comentado que faltaban piezas en las avionetas.
Sueños frustrados
A Mayt Jiménez (19) siempre le gustaron los aviones desde que era un niño. Por eso, para él, no le fue difícil elegir una carrera cuando terminó la secundaria. A los 17 años hizo su primer vuelo. “Le faltaba poco para volverse piloto comercial”, dijo su enamorada.
Así como Mayt, Boris también compartía el mismo sueño y amaba construir aviones en su casa. “Aún estaba terminando una”, dijo su padre. La misma vocación tenía Santiago Aldaz (30). Las familias piden celeridad en la búsqueda porque las horas son cruciales.
