Este lunes, países de todo el mundo han expresado sus dudas sobre la transparencia de las elecciones presidenciales en Venezuela celebradas el domingo. La autoridad electoral del país proclamó como ganador a Nicolás Maduro, reelecto para un tercer mandato, generando solo el apoyo ilimitado de algunos socios.
En 2018, el sucesor del fallecido Hugo Chávez (1999-2013) se impuso en unas elecciones boicoteadas por sus adversarios, superando al segundo candidato, Henri Falcón, por 47 puntos porcentuales. Sin embargo, en esta ocasión, la oposición participó unida en los comicios del domingo. Las encuestas indicaban como favorito al candidato Edmundo González Urrutia, un «outsider» apoyado por la carismática líder opositora María Corina Machado, quien no pudo postularse debido a una inhabilitación política.
A pesar de esto, según los datos anunciados por la autoridad electoral, controlada por el chavismo, Maduro obtuvo una ventaja de siete puntos sobre González, con el 80% de los votos escrutados, desatando una ola de controversia internacional sobre la integridad de las elecciones en Venezuela.