A dos meses de la difusión de los ‘CNM-Audios’, sin que el Congreso debata y apruebe la esperada reforma judicial, en el Poder Judicial las cosas empiezan a volver a la normalidad, con todo lo que eso significa.
Redacción
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En la Corte Suprema, imitando la resistencia del fiscal de la Nación, Gonzalo Chávarry, los jueces supremos consideran que con lo hecho hasta hoy es suficiente, más si la fiscalía no ha hecho nada.
El lunes último el presidente del Poder Judicial, Víctor Prado Saldarriaga, no logró que se aprobaran sanciones a los jueces mencionados en el informe de la fiscal del Callao, Sandra Castillo.
La sorpresa fue encontrar en ese juzgado al juez Luis David Pajares Narva. Pajares aparece en varios audios de la corrupción y en videos coordinando con Walter Ríos y el empresario Mario Mendoza, la solución de diversos procesos judiciales.
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Cuando estalló el escándalo de los ‘CNM-Audios’, Pajares Narva se encontraba como juez superior provisional de la Sala Civil Permanente del Callao. A ese cargo llegó en enero del 2017, nombrado por Walter Ríos.
En el 4to Juzgado Civil se encontraba el juez provisional Ysrael Castillo Espilco, también nombrado por Ríos. Era el quinto juez que asumía en ese juzgado, en una serie de cambios sin motivo aparente, desde agosto del 2016.
Con el escándalo y la declaración de emergencia de la Corte del Callao, todas las designaciones de Ríos quedaron sin efecto. Pajares pidió licencia y en el 4to Juzgado fue designado Pedro Dulanto Chacón.
El 7 de agosto último la demanda de Guillermo Tomasevich volvió a quedar lista para sentencia. Tomasevich pensó que al fin alcanzaría justicia y recuperaría su empresa.
Las esperanzas volvieron a chocar con la realidad. Aparentemente, Pajares pidió licencia mientras pasaba la tormenta y la semana pasada regresó. La actual presidencia de la Corte del Callao removió a Dulanto y repuso a Pajares.
Fuente: La República