La División de Prevención de Accidentes de Tránsito de la Policía Nacional (Divpiat) descartó, en forma preliminar, que una falla mecánica sea la causa del accidente de tránsito que se produjo en la víspera en el Serpentín de Pasamayo, al norte de Lima, que dejó 51 muertos y 6 heridos.
Por el contrario, los indicios permiten formular, como hipótesis principal del hecho, la invasión de carril contrario de parte de uno de los vehículos comprometidos en el lamentable hecho, informó el coronel PNP Franklin Barreto, jefe de la Divpiat, que ya inició las investigaciones para determinar las causas reales de la tragedia.
Precisó que la hipótesis que plantea la Policía, como causa principal del accidente, es que una de las dos unidades ha tenido que invadir el carril contrario, lo cual provocó que el ómnibus interprovincial y el tráiler, de las empresas San Martín de Porres y Levisa, respectivamente, tengan un impacto en el vértice anterior izquierdo. “Es por eso que el tráiler tiene daños en la parte de la rueda y suspensión por el impacto”, refirió.
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Para confirmar la hipótesis, los agentes especializados de Lima viajaron a la zona para recabar los elementos probatorios. Se prevé que a más tardar mañana presenten el informe técnico de carácter pericial para que el fiscal pueda hacer su labor dentro del nuevo marco procesal penal.
Barreto refirió que parte de las investigaciones es analizar el reporte del GPS del tráiler, el cual indicará la velocidad a la que circulaba. “El GPS no nos marca la velocidad de impacto, pero sí la del trayecto. En un plano satelital determinaremos el tiempo de velocidad que se desarrolló en ese momento. Eso nos permite hacer una evaluación de la conducta de los choferes”, dijo.
El jefe de la Divpiat adelantó que el chofer del tráiler, Cristian Quillahuamán Cusihuamán (40), se encuentra detenido por disposición del fiscal provincial en lo penal de Huaral. De ser hallado culpable, podría recibir entre 4 y 8 años de prisión por la presunta comisión del delito contra la vida, el cuerpo y la salud en la modalidad del homicidio culposo.
Quillahuamán se encuentra en la comisaría de Aucallama, en Huaral.
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En otro momento, el oficial sostuvo que la vía del Serpentín de Pasamayo es una zona muy peligrosa que requiere una intervención integral que contemple la señalización precisa de límites de velocidad y la instalación de guardavías que puedan contener la marcha del vehículo y reencausar su trayectoria a su carril.
Fuente: Andina