Los empresarios Anggi y Hugo Espino Lucana, detenidos de manera preliminar en una operación el 9 de agosto último y que también fue ordenada contra Yenifer Paredes, hija putativa del presidente Pedro Castillo, se acogieron a la figura de confesión sincera.
Según El Comercio, los hermanos declararon y reconocieron supuestos delitos en su testimonio ante las autoridades durante su testimonio brindado en la sede de la Dircote, donde permanecen recluidos.
El equipo especial de la fiscalía, liderado por Marita Barreto, usará esta información para que el proceso pase a la siguiente etapa, de investigación preparatoria, con un pedido de prisión preventiva contra la cuñada de Pedro Castillo, Yenifer Paredes, y el alcalde de Anguía, José Medina.
Las fuentes consultadas por el mencionado medio señalan que Hugo Espino y su hermana reconocieron que tanto Medina como Yenifer Paredes estuvieron detrás de la licitación que su empresa ganó para instalar un sistema de agua potable y saneamiento básico por más de S/3 millones en Anguía.
Hugo Espino habría dicho también que los depósitos que recibió el 6 y 26 de octubre del 2021 por un valor total de 90 mil soles y de manos de Walter y David Paredes, hermanos de Yenifer Paredes y la primera dama, Lilia Paredes, habrían sido ordenados por la esposa de Pedro Castillo.
Debido a este testimonio, el Ministerio Público estaría pidiendo una medida menos fuerte contra Hugo Espino y su hermana, mientras que contra Yenifer Paredes y José Medina se solicitaría una prisión preventiva de hasta 36 meses.
